Elsiglo de las luces

"LaIlustración"

Previamente en la historia ....

Durante el Siglo XVII (1600 - 1700), España tuvo una sucesión de reyes de la Casa de Austria, los Habsburgos, quienes no pudieron detener la decadencia del gran imperio español. Ellos eran: Felipe III, Felipe IV, y el último, Carlos II, "el Hechizado". Los reyes de este siglo preferían los placeres de la vida a las preocupaciones del gobierno del país, y dejaron esa responsabilidad en manos de sus "favoritos" aristócratas. Perdieron territorios europeos y vieron caerse el país en una depresión económica que causó la miseria y el hambre del pueblo. Las condiciones se pintan en numerosas novelas picarescas, que representan a los hidalgos y otra gente importante como unos pobres muertos de hambre que tratan de esconder su estado miserable bajo el orgullo.

La llegada de los Borbones ...

En el año 1700, el enfermo mental Carlos II muere sin hijos, dejando abierta la cuestión del heredero del trono español. Esto causó la Guerra de Sucesión (1700 - 1714), en la que eran rivales Carlos de Austria y Felipe de Anjou, nieto de Luis XIV de Francia. Se firmó el Tratado de Ultrecht, con que ganaron los franceses, y Felipe fue coronado con el nombre Felipe V de España, el primer rey de la casa Borbón. El rey actual de España, Juan Carlos I, pertenece a la misma familia. Debido al conflicto, que involucró casi todos los países europeos, España perdió los Países Bajos y Sicilia, Cerdeña, y Milán. Gibraltar y Menorca se pasaron a Inglaterra.

Como monarca, Felipe era inepto, pero a pesar de sus flaquezas, contribuyó al país la fundación de la Biblioteca Nacional (1712), la Academia de la Lengua (1714), y la Academia de la Historia (1738). Sin embargo, la decadencia nacional continuó.


El Palacio Real, Madrid

Durante la transición a los Borbones y a través de la primera mitad del siglo XVIII (1700 - 1750), todavía se siguió el estilo barroco en el arte y las letras, aunque ya era bastante despreciado por su exceso de ornamentación. De hecho, el"rococó" es el nombre que damos al arte y la literatura exageradamente adornados y floridos de la época. Por otro lado, algunos artistas y autores buscaban nueva inspiración en modelos italianos. Pero eran cada vez más influyentes las ideas de la Ilustración francesa, que coincidían con las ideas del "buen gusto", el progreso, y el orden que trajeron los extranjeros cuando se apoderaron del gobierno español. Mucha gente se volvía loca por la nueva moda francesa.

El "despotismo ilustrado" ...

El rey Fernando VI de Borbón asumió el trono en 1746, y en 1759 comenzó el reino de su hermano Carlos III. Los dos se asocian con el "despotismo ilustrado", un concepto de gobierno que deja el poder en manos del monarca, que gobierna en beneficio del pueblo pero sin su participación. España inició el esfuerzo de mejorar la economía interna del país, y bajo Carlos III, siguió el progreso, las reformas, el desarrollo de agricultura, la industria, y el comercio. Se dictaron leyes para conseguir una división más equitativa de la tierra, ya que a los nobles y a la Iglesia les pertenecía la gran mayoría del territorio. Durante esta época, Euskadi comenzó a desarrollarse económicamente. En 1767 se expulsó del país a los jesuitas, que controlaban las grandes universidades y apoyaban a la aristocracia.

Sin embargo, internacionalmente la política era un desastre. Francia ganaba más ascendencia en Europa y Inglaterra impactaba en la economía colonial con su piratería. En las Américas, tenían cada vez más influencia las ideas emancipadoras. La Revolución Norteamericana y la Revolución Francesa inspiraban la insurrección de los pueblos contra la mano de poder española, aunque irónicamente España había instituido varios principios liberales en la política y la economía de las colonias.

En la literatura ...

La producción literaria durante la época era realmente escasa y mediocre en España. Había muchas ideas intelectuales nuevas, pero no se expresaban en la poesía ni en la prosa imaginativa. Del año 1681 a 1760, hubo una lucha entre las ideas artísticas españolas y las nuevas ideas de Francia. Las viejas formas perdían su vitalidad, pero las nuevas formas importadas no fomentaron mucho interés creativo. Llegaban a ser doctrinarias y propagandísticas en tono.

Las características de lo que llamamos la "Ilustración" se pueden resumir así: Se cultivaba la confianza en la razón sobre los sentimientos o la intuición, se creía firmemente en la necesidad de difundir el saber, se ponían en duda las viejas formas de autoridad, y se criticaban los conceptos tradicionales de estructura social. Se proponían nuevas formas de gobierno. Se oponía al sentimentalismo en la literatura y el arte, y se rechazaba el exceso en todas formas. Se burlaba de la exageración del barroco. Se expresaba por medio del pamfleto político, el periódico, el ensayo crítico, y el tratado didáctico. Se establecían academias que tenían por objetivo establecer las normas en el arte, las ciencias, y el idioma. Los pensadores influyentes eran Francis Bacon, John Locke, y Adam Smith, aunque las ideas más radicales de los filósofos de la época no tuvieron tanto impacto en España como en otros países. Por lo general, los españoles no quisieron dejar ni su dedicación a la religión y la Iglesia, por un lado, ni su afán por la literatura imaginativa, por el otro.

En España, la influencia francesa produjo el enciclopedismo, un conjunto de doctrinas del matemático y filósofo Jean D'Alembert y del filósofo Denis Diderot, quienes compusieron una enciclopedia, y también el neoclasicismo, un movimiento que trató de restaurar el gusto de las normas artísticas de la antigüedad greco-latina. Hubo una reacción a esto llamada el casticismo (o el tradicionalismo), una insistencia en las formas y temas netamente españoles de la época pre-barroca. Los tradicionalistas querían revitalizar el espíritu nacional. Así se oponían las fuerzas contrarias del progreso y las de la tradición.

Algunas figuras interesantes ...

Había algunas figuras importantes en el campo de la literatura, sin embargo. Una era el padre Benito Jerónimo Feijóo, científico y crítico que escribía ensayos que atacaban la superstición. En su obra habla de todo: de la astronomía, la física, las matemáticas, la filosofía. Tenía un gran espíritu racional. Ignacio de Luzán (discípulo de Vico), el Padre Isla, y Diego Torres Villarroel escribían durante este período también, éste siendo el autor de una novela picaresca autobiográfica interesante.

El escritor Gaspar Melchor de Jovellanos fue también hombre de estado, educador, abogado, economista, historiador, y mucho más. Fue exiliado dos veces, y encarcelado por criticar la relación que tenía la reina con su amante. Escribió ensayos reformistas con fin didáctico, además de poesía.Como era tan importante la necesidad de enseñar a la gente, el género de la fábula recobró importancia, lo cual vemos en las obras de Tomás de Iriarte (Fábulas literarias, 1782) y Felix María Samaniego (Fabulas morales, 1781-84).En América las ideas del neoclasicismo coincidieron con un creciente sentido de identidad propia, e inspiraron a Andrés Bello y a José Joaquín Olmedo (entre otros) a escribir poesía que expresaba el deseo de los americanos de ser libres e independientes.

En el teatro, Leandro Fernández de Moratín escribió El viejo y la niña (1785) y El sí de las niñas (1801). Pedía moderación, en contraste con los excesos del barroco. Seguía siempre los preceptos del buen gusto y admiraba a Moliere, por lo que se llamaba "el afrancesado".

 

 

 

Francisco de Goya pintó este retrato
de la familia real de Carlos IV

La "Ilustración" termina en desorden y guerra ...

Cuando Carlos III murió en 1788, Carlos IV asumió el trono. Era cobarde, perezoso, y débil. Le dio al "protegido" Manuel Godoy (el amante de su esposa María Luisa de Parma) las riendas del poder. Godoy tomó una serie de decisiones desastrozas para el país -- declaró la guerra contra la nueva República de Francia y fue derrotado, luchó contra Inglaterra y en la batalla de Trafalgar (1805) perdió la gran parte de la armada española. La última y la peor decisión de todas fue dejar entrar al país a Napoleón de Francia, quien insistía que sólo quería cruzar el territorio español para invadir Portugal, cuando realmente lo que quería era apoderarse de España misma. Lo que sucedió se llama "La Guerra de la Independencia".